Reportaje

6º Aniversario del robo de Corea

El pasado domingo 22 de junio, se cuplían seis años de la famosa eliminación de España en el Mundial de Corea y Japón. La Roja cayó delante de Corea del Sur, en el partido correspondiente a los cuartos de final.

España venía de eliminar a Irlanda en una fatídica tanda de penaltis, en un partido en el que Casillas se consagró. Los coreanos, ya venían envueltos en el escándalo, y es que tumbaron a Italia con la gran ayuda de Byron Moreno, que pasó de la pobreza a aparecer con un pedazo Mercedes como que no quiere la cosa. No quiero saber de donde sacó el dinero...

Pues bien, el partido comenzaba a las 8:00 a.m. Yo que por aquel entonces tenía 8 años, me desperté en el momento en el que sonaban los himnos, convencido, al igual que mis familiares con los que veía el partido, de que sería una misión fácil para los de Camacho.

Los primeros minutos fueron aburridos, y en un momento dado, el portero de ellos, Lee Won Jae, si es que se escribe así, se golpeó contra el palo para despejar una falta, pareció tener que retirarse, aún me acuerdo de las risas que echamos diciendo: ¡Bueno, si este era malo, el suplente...! Finalmente se recuperó. Otro al que le gustaba "rebozarse" era su delantero, Ahn, que sin lugar a duds llevaba encima muchas horas de "Oliver y Benji". Pero esto no es lo que npos ocupa.

En el segundo tiempo empezó el escándalo. Destcar que los autores de semejante debacle, de robarle un Mundial a España fueron dos: un egipcio disfrazado de árbitro, Gamal Ghandour, y un colega que llevaba un banderín que le había tcado en la tómbola.

Todo empezó cuando poco después de comenzar el 2º acto, Ghandour anuló un gol a Baraja, por una inexistene falta, que sólo el vió. El partido siguió su curso, hasta que más adelante, el del banderín se inventó un fuera que supuso la invalidadez de un gol de Morientes. En la imagen, se aprecia como el balón no sale. Y ya para terminar de matarnos, el asistente se inventó un fuera de juego, cuando Morientes se iba sólo hacia el área de Lee.

Ya en los penaltis, los coreanos los marcaron todos, y Joaquín falló el suyo, un tiro muy flojito que Lee, que por cierto se adelantó, consiguió despejar.

Sin duda alguna, junto con el codazo de Tassotti, fue uno de los golpes más duro que recibió la selección española en un mundial a lo largo de su historia, ya no sólo por el heco de perder ese partido, sino porque junto con Brasil éramos los favoritos al título. Costará olvidar,al igual que el nombre de Sandor Puhl, el nombre de este personaje, de Gamal Ghandour y el de su asistente.

Os dejo un enlace a un vídeo, de lo que fue el escándalo de Corea en aquel junio de 2002. Pichen aquí.